Cómo elegir el calzado correcto
¿Sabes el tipo de calzado que necesita tu hijo o hija? ¿Eres de los que reciclas zapatos? ¿Tienes más en cuenta la marca, modelo o color que la forma del empeine, el talón o el peso?
Te invito a seguir leyendo estos consejos y a descubrir como un buen zapato te puede evitar disgustos en un futuro.
Lo primero que debes de saber es que el porcentaje de bebés que muestran algún problema en los pies al nacer es relativamente bajo. Tan solo un 2%. Con el tiempo el número de niños que deben corregir su forma de andar se dispara hasta alcanzar el 40%.
Todo hace indicar que enseñarles a caminar es tan importante como que lo desarrollen con un buen calzado. Para conseguir esto debemos aprender:
- El calzado siempre debe de estar fabricados en materiales naturales y de calidad. Un calzado de piel dejará al pie transpirar evitando la humedad, heridas y ampollas.
- Los zapatos no se heredan. Jamás. Si así de rotundo. El calzado se adapta a cada pie, forma su propia huella y su propia pisada por lo que ser usado por otro niñ@ con una forma diferente de andar provoca desviaciones en la forma de andar del “heredero/a” que probablemente repercutan en las rodillas, cadera y espalda.
- El peso de la suela importa, y ¡mucho!. Las suelas de los zapatos no deben de ser una carga para el tobillo. Todo lo contrario, deben de amortiguar la pisada y proteger el puente del pie. Elige siempre suelas consistentes flexibles y ligeras.
- Las deportivas son para hacer deporte. El diseño de una zapatilla de deporte está pensado para facilitar la pisada rápida tan habitual cuando se corre o salta. No suelen venir pensadas para adaptarse al puente del pie o al empeine, por lo que lo retienen demasiado en la parte delantera. Recuerda cuando el niñ@ termine de practicar su actividad cambia su zapatilla por un zapato de piel. Te ahorrarás muchos problemas relacionados con el uso excesivo de las deportivas.
- Por último podemos dividir el calzado de los más pequeños cuando cumplen 8-10 meses. Los zapatos del recién nacido son calcetines o patucos. A medida que se desarrolla su pie se le debe de poner un calzado muy flexible, ligero y de piel.
- Una vez cumplidos los 8-10 meses se debe de tener en cuenta la zona del empeine. Esta zona debe de ser amplia, dejando sitio para el crecimiento del pie. También se debe de seguir respetando la calidad del material, la ligereza del zapato y la flexibilidad de la suela favoreciendo la tracción del niño y con contrafuerte en el talón sin llegar aún al tobillo.
Esperamos que tengas en cuenta estos breves consejos la próxima vez que busques zapatos. Si tienes alguna duda busca siempre a un profesional que te aconseje más allá de la talla.
Si tienes alguna duda, aportación o sugerencia estaremos encantados de leerte :)
Un saludo desde D´Dos Moda Infantil